sábado, 28 de diciembre de 2013

Ideas para una historia universal en clave cosmopolita

Con este nombre endiabladamente largo, Immanuel Kant nos expone con su siempre concienzuda (Y para mi gusto, casi apabullante e inhumana) prosa sus ideas acerca de los orígenes de la Humanidad, la Sociedad, y esas cosas tan importantes que son los "bichos" humanos, como diría uno de mis profesores...

En sí, este tratado es más bien escueto y corto, y tal y como nos acostumbra Kant (Ver La Paz Perpetua), va exponiendo en breves párrafos sus ideas acerca del funcionamiento de la Historia para el Hombre. Lo que asombra de Kant es su genialidad en ciertos párrafos.

En general, el texto hace especial hincapié en tratar de descifrar el funcionamiento de la Historia conforme a los hechos que en ella se producen y que deben de ser intrínsecos y estar supeditados a la Naturaleza. Teniendo claro este precepto, el resto es coser y cantar. La Ilustración de Kant supura por todas partes en este tratado: La idea de la Historia como forma de perfección de la Humanidad, una especie de optimismo antropológico en el futuro, cierto tinte eurocéntrico... Si embargo, bajo mi punto de vista y como ya dije, el valor de esta obra reside en sus párrafos centrales, donde llega a preceder al Evolucionismo (No digo a la teoría dialéctica de Hegel, porque fueron quasi-contemporáneos): La evolución social (En este caso, es un Darwinismo Social un tanto desteñido, por decir algo a favor de Kant) se da por la contradicción sufrida entre dos componentes de una misma sociedad (Tesis-Antítesis-Síntesis: Operación matemático-filosófica "machacada" hasta la saciedad entre los historiadores...). Dada la solución, que para Kant es siempre positiva (Manías ilustradas...) , llegamos a pasar al siguiente "Gradus ad Parnassum" (Si se me permite este homenaje el amigo Clementi-y a Fux!).

Kant me resulta especialmente genial, no por su Pre-"Darwinismo Social" (Con el que no comparto ningún presupuesto) sino por la "Cabezonería" de defender siempre una especie de mínimo de dificultad a vencer en esta vida para  conseguir que el Hombre consiga hacer brotar la genialidad de su naturaleza. Creo que es obvio que esta idea tiene que ver con lo de que este es "el mejor de los mundos posibles", aunque contraria e indirectamente. Kant afirma "Sí, este no es el mejor de los mundos posibles .¡Gracias a Dios! ", porque sin dificultad que salvar, no existe la ciencia que salva tal dificultad, tan sencillo como eso: Sin una necesidad de crear algo que nos ayude a sobrellevar nuestra vida en este mundo, ¿Dónde quedaría Da Vinci o Verdi?. Yo ya digo, considero esta idea encantadora, aunque vaya algo en contra de mis propias ideas (Si me preguntan, me es preferible vivir en el Paraiso y perder a todos los genios de la Humanidad, que vivir en el Infierno y tener un vaso de agua cada cien años para consolarme).

En fin, Kant tampoco se deja en el tintero algunos presupuestos filosófico-político-judiciales que no nos son muy reveladores para la parte histórica, aunque Kant parece decantarse por la típica concepción de los primeros elementos políticos como necesidad de la humanidad para reglar las interacciones entre vecinos etc, ect,,,,

Un tratado recomendable de leer, mas no indispensable.

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